El filtro "Niveles" es una herramienta rápida y sencilla para modificar el balance de blancos de una fuente de vídeo. Mediante el ajuste de un punto negro, un punto blanco y un punto gris, este filtro puede utilizarse para mejorar el aspecto general de las secuencias, sobre todo si la iluminación es escasa o es necesario igualar el aspecto de varias cámaras.

Añadir el filtro
Añade el filtro Niveles a una fuente haciendo clic en "fx" junto al nombre de la fuente y seleccionando el filtro Niveles en la ventana emergente.

Configurar el filtro

Siga esta receta para configurar el filtro:
- Haga clic en el icono de ampliación (1) para ampliar la imagen del antes y el después.
- Seleccione la herramienta Selector de color negro haciendo clic en la barra situada debajo de la vista de origen (2) o seleccionando "negro" en el menú emergente de la herramienta Selector de color (3).
- Utiliza la lupa para encontrar un punto de color adecuado en la imagen (4).
- Repita el proceso para el blanco y el gris, en ese orden, porque si elige blanco o negro, el gris volverá a sus valores predeterminados.
Puede ver el resultado en la parte derecha del panel de configuración.
Ventajas del uso de tarjetas grises para una reproducción precisa del color y los niveles de exposición
Las tarjetas grises son una herramienta sencilla pero potente que se utiliza en fotografía y videografía para conseguir una reproducción precisa del color y de los niveles de exposición. Proporcionan un punto de referencia estandarizado, que es fundamental cuando se trabaja con varias cámaras o cuando se dispara en condiciones de iluminación cambiantes.
Una tarjeta gris suele ser un trozo rectangular de cartón o plástico de color neutro que refleja una cantidad específica de luz, a menudo alrededor de 18%. Si fotografías o filmas una tarjeta gris en las mismas condiciones de iluminación que la escena que vas a fotografiar, podrás establecer un nivel de exposición y una temperatura de color de referencia para tu cámara.
El uso de una tarjeta gris puede ahorrar mucho tiempo en la posproducción, ya que se pueden corregir los problemas de color y exposición de forma rápida y sencilla utilizando la tarjeta gris como punto de referencia. Además, las tarjetas grises son relativamente baratas y fáciles de transportar, lo que las convierte en una herramienta imprescindible para cualquier fotógrafo o videógrafo serio.
En general, las tarjetas grises son una herramienta útil para conseguir un color y una exposición precisos en tus trabajos de fotografía y videografía. Proporcionan un punto de referencia estandarizado que garantiza resultados coherentes y pueden ahorrarte tiempo y esfuerzo en la posproducción.